lunes, 23 de febrero de 2009

DEPENDENCIA DE LA MINERIA V/S DIVERSIFICACIÓN ECONÓMICA

Ante el notable aumento de despidos en las faenas mineras, cabe destacar que por ser este, un recurso no renovable y dependiente de los precios en los mercados internacionales, Atacama está condenada a mantener niveles inestables de desarrollo económico, más aún podemos preguntarnos;

¿Qué pasará cuando comience el agotamiento de este recurso?, o sea, cuando ya no tengamos más que extraer a las entrañas de nuestro noble suelo.

La diversificación de nuestra economía, es sin lugar a dudas la alternativa para hacer frente a este incierto futuro regional, aprovechar nuestras ventajas comparativas en el uso de nuestros otros recursos y condiciones, nos pone en un escenario que debe ser visto como una oportunidad al alcance de nuestras capacidades; aprovechar nuestro clima privilegiado utilizando el sol, el viento, el mar, nuestros cielos; buscar alternativas económicas-productivas, se presenta como una real opción de resurgimiento económico. Por otra parte nuestra rica historia, nuestro patrimonio y hermosa geografía de encantadores lugares de cordillera a mar, abren una clara opción para desarrollar un turismo de intereses especiales y transformarlo en una oportunidad para abrir nuevos nichos económicos poco explotados.

Ante el inminente cierre definitivo de las faenas del mineral el salvador, ya hace algún tiempo en la provincia de Chañaral, el comité de desarrollo de Chañaral y en consejo de desarrollo de Diego de Almagro, entregaron señales claras de lo que debiera preocuparnos para hacer frente a este tipo de crisis, sin embargo nuestras autoridades han mantenido un sesgo por seguir patrocinando solo las labores tradicionales y asumiendo funciones paliativas y de corto plazo cuando hay recesión económica, o sea, los famosos programas de empleo vinculados a subsidiar labores que no ofrecen mayor desarrollo para nuestro futuro económico.

El desarrollo endógeno, es la capacidad de los territorios, para aprovechar sus recursos naturales, humanos y el conocimiento para surgir de una manera unida y sostenible, a partir de lo que son para producir su riqueza, con una economía de escala que nos acoja a todos sin exclusión.

Es hora de diversificar la economía regional.

Atte, Wilson Wastavino Rivera, Atacameño.