jueves, 4 de diciembre de 2008

si fuera intendente elegido por voto popular, Atacama sería la de Pedro León Gallo

Si fuera intendente elegido por voto popular en Atacama, representaría a la gente por sobre las empresas.

Si fuera intendente promovería la inscripción automática y el voto voluntario.

Si fuera intendente, exigiría la instalación de plantas desaladoras y desalinizadoras de agua.

Si fuera intendente obligaría a las empresas mineras a desalinizar agua de mar para sus faenas, prohibiéndoles usar agua dulce de los ríos canales, cauces y napas subterráneas, impedir que se le den para ello facilidades, pero que si se les facilite la posibilidad de invertir en poner plantas desalinizadoras, mediante franquicias triburtarias.

Si fuera intendente, ya tendríamos doble vía.

Si fuera intendente, obligaría a las empresas a hacer caminos o a mejorar los que ocupan.

Si fuera intendente, no permitiría el saqueo de Pacualama.

Si fuera intendente tendríamos liceos, y un hospital moderno con médicos en todas las especialidades.

Si fuera intendente, ya habría pavimentado el paso San Francisco.

Si fuera intendente instaría por la instalación de un Casino en Caldera.

Si fuera intendente pelearía por que Caldera fuera un puerto Principal.

Si fuera intendente eliminaría de raíz los impuestos de timbres y estampillas.

Si fuera intendente dejaría en un mínimo el impuesto a los combustibles.

Si fuera intendente bajaría el IVA uno o dos puntos (aunque ello conlleve subir moderadamente los impuestos a las empresas, incluidas las extranjeras). También eximiría o rebajaría los impuestos a las utilidades no retiradas.

Si fuera intendente educaría a los funcionarios dependientes de servicios fiscalizadores, comno SII, Dirección del Trabajo, Salud, para que actúen con criterio, y no como gente envidiosa de la prosperidad ajena, especialmente frente a los emprendedores que recién comienzan sus faenas, y también para que no se sometan tan fácilmente al poder influencia y dinero de las empresas extranjeras a quienes todo le consienten a diferencia del pequeño empresario nacional a quien realmente persiguen.

Si fuera intendente, sería implacable con la corrupción y prohibiría que los funcionarios que salen mal de un servicio público, sean reubicados en un puesto mejor a los pocos días, como vemos de ordinario en este país.

Si fuera intendente me fijaría detalladamente en la idoniedad de los negociadores de nuestros tratados y acuerdos internacionales, pondría cuidado en su nombramiento y no como en la actualidad que son designados a dedo, entre gallos y media noche, y nadie conoce las embarradas que hacen sino hasta que queda la escoba.

Si fuera intendente obligaría a las grandes empresas extranjeras a pagar sus impuestos, sin tantas posibilidades de eludir.

Si fuera intendente Haría denunciable los hidrocarburos sólidos y gaseosos, para que los puedan explorar y encontrar los particulares, obviamente que adecuando las normas para que ellos puedan obtener buenas ganancias, pero eso sí, evitar que se lleven todo y no dejen nada o casi nada al país y a la región desde donde extrae la riqueza no renovable, como sucede con los minerales actualmente.

Si fuera intendente cuando se dicten las normas haría más transparente la discusión con el pueblo, para evitar que se dicten leyes que persiguen favorecer al débil y terminen perjudicándole y favoreciendo a los poderosos, como sucedió con las famosas e ineptas patentes de aguas que está obligando a los débiles a transferir sus derechos a las grandes empresas antes que se las rematen. A las únicas que no les ha afectado esa patente es a las empresas que quisieron afectar. Al contrario ellas ahora tienen la posibilidad de acaparar más.

Si fuera intendente, en lugar de instar por la realización del Paris Dakar promovería la realización del miss universo y poblaría nuestras playas con las mujeres más hermosas del mundo y no con esos indecentes del Paris Dakar.

Si fuera intendente, promovería la identidad atacameña y el amor por nuestra tierra.

Si fuera intendente, Atacama sería la de Pedro León Gallo.

La II asamblea constituyente lucha por tumbar el centralismo ciego y delirante, que denunciara el pueblo atacameño hace casi ya 150 años.

Por regiones libres dignas y autónomas, y por el Chile y la región que merecemos.

Atte, León Copadeoro.